jueves, 16 de diciembre de 2010

EL FRÍO EN TU PIEL. !NO SOMOS PINGüINOS¡

Los meses de invierno significan mucho más que cielos grises y mañanas frías....Durante los meses de frío, la piel sufre los efectos de los cambios de temperatura. De ambientes calefaccionados pasamos rápidamente al frío de la calle. Así, la piel se reseca y deshidrata.

¿Cuál es el problema?

La mayoría de las personas alternamos entre un ambiente "controlado" que siempre está bien calefaccionado en invierno, con períodos "incontrolados", más cortos, que suceden en el exterior, cuando salimos. El estar constantemente cambiando de temperatura provoca la sequedad en la piel.
Durante el invierno, las calefacciones deshidratan la piel y hay que acostumbrarse al frío y viento. Estos son factores que empiezan a dejar la piel más sensible y seca.

¿Por qué es peor en el invierno?

La piel que básicamente es sensible y más seca sufre en ambientes que contienen baja humedad, ya que los sistemas de calefacción quitan la humedad natural de la piel. Cuanto menos humedad hay, más rápido se evapora el agua de la piel.

¿Cuál es la solución?

La humectación diaria y regular es indispensable para mantener la humedad natural de la piel. Un buen jabón humectante agrega agua necesaria a la piel, pero lo más importante es que la mantiene.
Utilizar leches corporales en las zonas mas secas de la piel también ayudará a mantener esa agua en la dermis y la epidermis y para las pieles mas secas o zonas mas dañadas se puede optar por la utilización de mantecas corporales regenerativas como la nuestra que además de aportar esa hidratación cubren con nutrientes y estimula la regeneración celular.

 ¿Qué podemos hacer?

•    Intentar bajar la temperatura de las calefacciones cuando se pueda.
•    Aplicar un producto humectante, en crema o jabón.
•    Proteger todos los días los labios con un bálsamo regenerante y de preferencia sin perfumes o colorantes añadidos.
•    Bajar la temperatura del agua al tomar un baño o ducha, y que la duración del mismo no sea tan larga.
•    Tomar mucha agua. El cuerpo necesita agua, pero si no tiene la necesaria, la tomará de la piel.
•    Hay que estar atento al tipo de jabón que se usa. Muchas personas usan jabones desodorantes o antibacteriales que en invierno contribuyen a la sequedad. Es mejor usar limpiadores con pH balanceado/neutro, para piel seca, o que contengan algún humectante o emoliente adentro como un jabón de rosa mosqueta, mil, caléndula, manzanilla, manzana, abedul entre otros.  toda nuestra línea de productos de higiene personal. Además es muy importante las leches corporales o las mantecas corporales regenerantes que antes mencionamos.
•    No olvides tampoco tu protección solar básica que aun con los días nublados los rayos ultravioleta pueden tener la capacidad de penetrar en tu piel y provocar más resequedad, manchas tópicas o irritaciones anormales.



Artículo proporcionado por Náay Botanicals

2 comentarios:

  1. Hola sebiora muy interesante tu articulo , y tengo una pregunta el jabon de caléndula es un producto natural , ya que soy de piel muy sensible , excelente el blog felicitaciones

    ResponderEliminar
  2. Hola Mariela, muchas gracias por las felicitaciones. Si tienes la piel sensible, este jabón es ideal para ti, mirate nuestra eshop de cosmética natural www.sebiora.com, ya que tenemos uno de Náay, 100% natural, que igual te puede interesar :-)

    ResponderEliminar